sábado, 20 de agosto de 2011

De regreso al nido






Basta salir del mismo, para querer retornar. Esa cosa nuestra, nuestro nido.
Viajar es una de las grandes metas en mi vida, pues suelo hacerlo de manera continua. Ello me hace cambiar la energía siempre y renovarme y conocer gente de todas las disciplinas.
Como sumar el capital de relaciones humanas y otras costumbres y hábitos.
Nunca había estado fuera de casa tanto tiempo.
Y uno se acostumbra a su espacio, ese que cobija siempre, donde uno se abriga, cocina a su manera y recibe a quien considera.
Y sobre todo si uno se ocupa de ponerle el calor adecuado siempre, las flores que armonicen y la alegría necesaria a cada jornada.
Nuestro nido cuenta con las formas elegidas, los detalles únicos... esos que nos identifican como la punta en el orillo.
Tanta cosa, para expresar mediante mis mejores amigas, "las letras" que ya estoy de vuelta y me hace feliz el hecho!!!
Como teclear sentada aquí, en este ordenador que tanto sacrificio me costó obtenerlo mientras me acompaña mi otra amiga: "la música" como felices por mi vuelta.
Cada cosa cuenta con lo suyo, como mi tel que estaba mudo y ya suena a cada rato para acercarme a tantos que han notado mi ausencia y eso es bueno.
C0mo a todo, lo agradezco.
El NIDO, está lleno de ruidos y ya cené con mi mejor amigo anoche, compartimos una tortilla española hecha por mis manos y tomé un café con leche calentito en este agosto frío, con una amiga del conocimiento y me crucé con una oyente y vamos retomando el camino que transito en esta tierra.
Ya estoy , en mi ruta.
Ya estuve un par de días en casa de mi hijo y jugué con su mascota quien durmió en mis pies y me llenó de mimos a su "abueli".
Aunque una amiga este internada , ya en el final de su existencia por haber fumado toda su vida y una cuñada con cáncer en su columna y en su pecho por no ir al médico desde que fue madre.
Cada uno elige, es cierto.
No se valora la vida, a veces superan las adicciones y pasa tan rápido la vida sin aprender a vivirla.
Ya de vuelta, a seguir construyendo sueños para que se cumplan.
Y contenta de reencontrarme con gente querida.

Nerina

5 comentarios:

Rafael Humberto Lizarazo Goyeneche dijo...

Hola, Nerina:

Nada como el calor de hogar y el cariño del nido, no se puede olvidar ese lugar querido.

Un abrazo.

Leonor Rodríguez Rodríguez dijo...

De acuerdo con tu mensaje, creo que como nuestro hogar no hay nada en el mundo.-Muy bellas fotos.
Gracias por compartir tus post.
Saludos afectuosos, Nerina.
Leonor.

Nerim dijo...

Nerina ¿ya has regresado?, no me llamaste para quedar y vernos, ¿que pasó?. Estaba esperando tu llamada, tu tenias mis telefonos y quedamos en que me llamarias.

De todas formas, espero que tu viaje haya correspondido a tus expectativas.

Un beso

betty badaui dijo...

Neri,leí tu texto con calma, tratando de alcanzar toda la esencia que habrás depositado en él y me quedó en el ambiente la sensación de haber aprendido algo más para vivir mejor; gracias Nerina, un abrazo
Betty

Anónimo dijo...

MÁS ALLÁ DEL REGRESO AL HOGAR, TUS PALABRAS SON EJEMPLO DE VIDA
UN ABRAZOTE
ANAHI DUZEVICH BEZOZ